Se calcula que 10 millones de personas en Alemania padecen el síndrome del intestino permeable. Con el intestino permeable, la pared intestinal se vuelve permeable a sustancias nocivas, lo que favorece la inflamación y puede causar muchas molestias.
La pared intestinal tiene una importante función de barrera. Impide que entren en el organismo sustancias tóxicas, agentes patógenos y otras sustancias extrañas. Las células de la pared intestinal se mantienen unidas mediante uniones estrechas, que pueden considerarse una especie de cremallera. La pared intestinal también está protegida por una capa de moco, anticuerpos y sustancias antimicrobianas.
En el síndrome del intestino permeable, esta importante barrera se vuelve permeable.
El intestino permeable puede tener varias causas. La inflamación, por ejemplo debida a infecciones bacterianas o a una dieta que promueve la inflamación, puede favorecer el intestino permeable. El alcohol, ciertos medicamentos, las intolerancias alimentarias y el estrés también pueden provocar el síndrome del intestino permeable.
El síndrome del intestino permeable se manifiesta con numerosos síntomas, como dolor abdominal, malestar, diarrea, cansancio y fatiga. El intestino permeable también suele asociarse a síndrome del intestino irritable asociado al síndrome del intestino irritable.
Desgraciadamente, no existe tratamiento para el síndrome del intestino permeable en la medicina convencional, ya que aún no está reconocido oficialmente como enfermedad.
Sin embargo, hay numerosos indicios de que los micronutrientes pueden ser útiles para el síndrome del intestino permeable.
Probióticos
Probióticos pueden ser útiles para el intestino permeable por varias razones. En primer lugar, desplazan a las bacterias patógenas que pueden dañar el intestino en número excesivo. También hay pruebas de que los probióticos pueden estimular la formación de uniones estrechas. Los probióticos también parecen ser capaces de favorecer la formación de una capa mucosa protectora.[1]
Los estudios sugieren que la ingesta de probióticos podría reducir la zonulina en la sangre. La zonulina es un marcador importante de la permeabilidad de la pared intestinal.
Colágeno
Colágeno contiene muchos aminoácidos que positivamente en los intestinos pueden tener un efecto positivo:
- Es muy rica en glicina. Hay pruebas de que la glicina podría mejorar la función de barrera intestinal
- Contiene mucha prolina e hidroxiprolina, que podrían mejorar la cicatrización de heridas y hay pruebas de que los dos aminoácidos podrían ser útiles en la colitis ulcerosa
- El aminoácido L-glutamina parece ser capaz de favorecer la función de las uniones estrechas y podría apoyar a las bacterias beneficiosas del intestino[2]
Reishi
El hongo medicinal Reishi es muy rico en polisacáridos, de los que se dice que tienen muchos efectos positivos en los intestinos.
Se dice que el hongo Reishi puede reforzar el sistema inmunitario y hay numerosos indicios de un efecto antiinflamatorio. Por tanto, es de suponer que el hongo Reishi puede contrarrestar la inflamación asociada al intestino permeable. El hongo Reishi también parece capaz de mejorar la flora intestinal y favorecer la regeneración de la mucosa intestinal.[3]
La vitamina D
La vitamina D tiene una función importante en la división celular, por lo que presumiblemente puede contribuir a la formación de nuevas células intestinales. La vitamina D también tiene un efecto antiinflamatorio. Los científicos suponen que, por tanto, puede contrarrestar la muerte de las células intestinales debida a la inflamación.[4]
Por desgracia, la carencia de vitamina D está muy extendida. Según un estudio del Instituto Robert Koch, más del 50% de los alemanes no tienen un aporte adecuado de vitamina D.
Zinc
Zinc tiene funciones importantes en la división celular y contribuye al mantenimiento de una piel normal.
La inflamación también aumenta la necesidad de zinc. Por eso es probable que la inflamación asociada al intestino permeable provoque una deficiencia de zinc más fácilmente que en las personas con un intestino sano.[5],[6]
Curcumina
La curcumina es el principio activo de la cúrcumaal que se atribuyen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
La cúrcuma también es rica en sustancias amargasque puede estimular la producción de ácido estomacal y facilitar la digestión.[7]
Conclusión: los nutrientes antiinflamatorios son prometedores
El síndrome del intestino permeable está asociado a la inflamación y daña todo el organismo. Los nutrientes antiinflamatorios pueden ayudar a contrarrestar esta inflamación. Las personas con intestino permeable deben asegurarse de tener un buen suministro de estos nutrientes y evitar las carencias.
[1] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27456494/
[2] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/25972430/
[3] https://foodandnutritionresearch.net/index.php/fnr/article/view/1559
[4] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26137304/
[5] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/7829006/