Se dice que la clorofila favorece la desintoxicación, tiene un efecto antioxidante y muchos otros efectos positivos. ¿Cuál es la verdad? En este artículo descubrirás qué es exactamente la clorofila y cómo puede ayudarte.
¿Qué es la clorofila?
La clorofila es el pigmento que da a las plantas su color verde. Es esencial para la fotosíntesis, en la que se produce almidón y oxígeno a partir del dióxido de carbono (CO2) y la luz ultravioleta.
El término clorofila procede del griego: "chloros" significa verde y "phyllon" significa hoja. En otras palabras, una hoja verde.
Se dice que la clorofila es una de las razones por las que las verduras verdes son tan saludables.
¿Qué hace la clorofila?
Actualmente se están investigando científicamente los siguientes efectos de la clorofila:
Protección contra las toxinas del moho
La clorofila puede unirse a las aflatoxinas y, por tanto, presumiblemente inhibir su absorción. Las aflatoxinas son toxinas de moho sospechosas de causar cáncer de hígado. En un estudio, la ingesta de clorofila pareció reducir la exposición a las aflatoxinas en un 55%.[1]
La clorofila y la piel
Se dice que la clorofila tiene efectos antiinflamatorios, antioxidantes y desintoxicantes. Estas propiedades podrían tener un efecto positivo sobre la piel.
En un estudio, la clorofila pareció mejorar el acné y reducir los poros dilatados de la cara.[2]
Otro estudio sugiere que la clorofila podría contrarrestar el envejecimiento de la piel causado por la luz ultravioleta.[3]
Clorofila para el mal olor corporal
La clorofila se utiliza desde hace mucho tiempo para tratar el mal aliento y otros olores corporales desagradables. Por eso también se la conoce como el "desodorante del interior".
En un estudio sobre personas mayores, la clorofila parecía regular la digestión y, al mismo tiempo, mejorar el olor de las heces.[4]
Clorofila para la desintoxicación
La clorofila parece ser capaz de ligar no sólo las aflatoxinas, sino también los metales pesados, los hidrocarburos aromáticos (HAP), las dioxinas y las aminas aromáticas heterocíclicas. Se supone que la clorofila puede reducir así la nocividad de estas sustancias.
Clorofila para la hematopoyesis
La clorofila es muy parecida al pigmento rojo de la sangre, el hemo. La diferencia entre la clorofila y el hemo es que la clorofila contiene magnesio en lugar de hierro.
Los estudios sugieren que la clorofila podría tener un efecto positivo sobre los niveles de ferritina en casos de anemia.[5] La ferritina es el valor de almacenamiento del hierro. Esto es algo sorprendente, ya que la clorofila no contiene hierro.
Por el contrario, a menudo es difícil aumentar los niveles de ferritina con suplementos de hierro. La solución al enigma reside probablemente en el hecho de que el organismo no sólo necesita hierro para formar hemoglobina, y esto es exactamente lo que aporta la clorofila.
Riesgos y efectos secundarios de la clorofila
Tomar clorofila parece aumentar la fotosensibilidad en algunas personas. Por tanto, debes tener especial cuidado de protegerte del sol cuando tomes clorofila.
La clorofila también puede provocar problemas digestivos, como náuseas y diarrea, al principio de la toma.
La clorofila también puede decolorar las heces y la orina, aunque esto es inocuo.
Comprar clorofila: En qué debes fijarte
Siempre debes prestar atención a la calidad de la clorofila. La ausencia de aditivos innecesarios y la producción en un laboratorio alemán son características de calidad importantes.
También debes asegurarte de que la clorofila contiene clorofilina natural (la forma extraída de la clorofila) y no clorofilina producida sintéticamente con cobre en lugar de magnesio.
El Gotas de clorofila de Viktilabs contienen clorofilina natural de alfalfa (Medicago sativa), una útil planta asiática de la familia de las leguminosas. No contienen agentes aglutinantes, separadores ni edulcorantes, colorantes ni otros aditivos innecesarios. Las gotas de clorofila se desarrollan en Alemania.
[1] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/11724948/
[2] https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6011872/
[3] https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/25844615/
[4] https://agsjournals.onlinelibrary.wiley.com/doi/abs/10.1111/j.1532-5415.1980.tb00124.x
[5] https://www.phcogj.com/sites/default/files/10.5530pj.2016.4.10.pdf